En las primeras seis semanas del año 2024, Argentina ha experimentado un drástico aumento en los casos de dengue, generando creciente preocupación entre las autoridades de salud y la población en general. Según el último informe del Boletín Epidemiológico Nacional del Ministerio de Salud argentino, el país ha registrado un total de 39,544 casos de dengue, en comparación con solo mil casos en el mismo período del año pasado.
La incidencia acumulada a nivel nacional es alarmante, superando los 100 casos por cada 100,000 habitantes. Este rápido incremento en la propagación de la enfermedad transmitida por mosquitos del género Aedes ha llevado a que más del 90% de los casos sean de origen autóctono, con 36,765 personas afectadas por la enfermedad dentro del territorio argentino.
Cabe destacar que, del total de casos, 1,813 se consideran importados, mientras que 966 aún se encuentran en fase de investigación por las autoridades sanitarias. Esta brecha de menos de 2,000 casos importados resalta la prevalencia del dengue a nivel local y plantea desafíos adicionales para el control de la enfermedad.
La situación en Argentina se suma a la tendencia en América del Sur, donde Brasil lidera las estadísticas de propagación del dengue con 555,583 casos y 94 muertes reportadas. La colaboración regional y las medidas coordinadas de control se vuelven fundamentales para contener la expansión del virus y mitigar los impactos en la salud pública.
