Las causas por la escasez de agua son más de una; la notoria falta de lluvias, el fenómeno La Niña, las altas temperaturas, entre otras.
El dique San Jerónimo se encuentra en su nivel histórico más bajo y la preocupación por la sequía se convierte en moneda corriente.
En sus mejores épocas, el San Jerónimo es un hermoso reservorio de agua en donde se puede observar a la naturaleza en su forma más pura. Sin embargo, lo que antes era un gran atractivo, hoy se convirtió en un terreno lleno de barro en donde es posible caminar a 18 metros de profundidad.