El ministro de Economía, Sergio Massa, se enfrenta hoy a su primer desafío financiero desde que fue nombrado candidato a la presidencia por Unión por la Patria, en una lista de consenso junto al jefe de Gabinete, Agustín Rossi. En la segunda operación del mes, el Ministerio de Economía buscará hacer frente a los vencimientos de deuda por un total de $723.000 millones y obtener financiamiento adicional, como es habitual en estos casos.
El canje de deuda realizado durante la primera semana de junio permitió postergar vencimientos por $7,4 billones, lo que brindó un respiro a la cartera económica. Desde entonces, se llevó a cabo una exitosa licitación a mediados de mes y hoy se realizará la segunda. El objetivo no solo es cubrir los pagos pendientes, sino también obtener fondos adicionales en un contexto de creciente déficit fiscal.
Tanto el Gobierno como el mercado creen que la situación política actual contribuirá a ayudar al equipo económico a alcanzar sus metas de financiamiento, incluso con bonos de mayor plazo, aunque aún indexados. Según el economista Miguel Kiguel, los inversores no tienen alternativas de inversión y el mercado se encuentra más tranquilo. Además, existe una mayor confianza en que Massa logre un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Kiguel también menciona la posibilidad de ofrecer instrumentos a tasa fija de corta duración, que podrían despertar interés en los inversionistas.
Sin embargo, en la licitación de hoy no se contempla esa opción. Según fuentes del Palacio de Hacienda, se están ofreciendo instrumentos de mayor plazo, y se considera un buen momento para extender los plazos hasta 2024 y 2025. Un informe destaca que cerca del 66% de los vencimientos pertenecen a manos privadas, mientras que una parte no despreciable corresponde a componentes públicos.
El mercado ha recibido positivamente el despeje de vencimientos y los resultados de las licitaciones anteriores. Además, se ha reducido la incertidumbre sobre una posible elección dividida por tercios, lo que ha generado confianza en la candidatura de Massa por Unión por la Patria. Aunque este escenario no elimina por completo la incertidumbre en torno a la deuda en pesos, se considera un paso hacia una transición más ordenada.
A pesar de las novedades políticas, persisten los desafíos macroeconómicos y, especialmente, el problema de la bola de pesos frente a una eventual salida del cepo cambiario. La situación financiera del país sigue siendo un tema clave que requerirá atención y medidas adecuadas para garantizar una estabilidad económica a largo plazo.
