En una noche llena de emociones, el cantante y compositor bahiense, Abel Pintos, se erigió como la figura en el cierre del Festival Nacional de Folclore de Cosquín, la novena y última luna que iluminó la Próspero Molina.
Con un repertorio renovado que capturó la esencia del folclore argentino y su inconfundible estilo, Pintos deslumbró al público presente plaza Próspero Molina, que no dejó de corear sus canciones.
“Siempre es lindo venir acá porque encuentro gente que quiero mucho y de hace años. Veo crecer artistas. Es un goce total venir a Cosquín”, expresó, agradeciendo la calidez del público y la conexión especial que siente con el escenario de Cosquín.
Además, dedicó unas palabras de agradecimiento a Susana Buontempo y a todos los seguidores del festival, deseando que el espíritu de Cosquín perdure por muchos años más.
En la misma noche, la cantante, Paola Bernal, también dejó su marca con una actuación que destacó su compromiso con la música de raíz nativa del país.
La velada final se enriqueció con la participación de otros destacados artistas, entre ellos Leandro Lovato, Dúo Celeste, Juan Fuentes, Franco Orozco, Cuarteto Kare, Ceibo y Belén Herrera, conformando una programación diversa y emocionante.
Además de las brillantes actuaciones, la ceremonia incluyó momentos de reconocimiento con la entrega de los premios Revelación y Consagración de este año. Luciano Taragno y José Luis Aguirre fueron los merecidos galardonados, consolidando así su impacto y contribución al mundo del folclore.