Parece ser que deber es algo más que moneda corriente en Argentina.
El día de ayer el país alcanzó lo que se conoce como “default ambiental”. Un indicador que demuestra que a partir de este momento todo lo que se consume queda en el “debe” de la cuenta de los recursos naturales que se generan en el país. Es decir que estamos consumiendo más de lo que tenemos, en pocas palabras, haciendo uso de recursos “prestados” por la madre tierra.
Dicho indicador busca generar conciencia, actuando como “margen” global de la velocidad en la que estamos “consumiendo el planeta”.
La fecha para todos los países es el 28 de julio, siendo esta dinámica, es decir que no es fija y la misma se modifica año a año. Basándose en el consumo y uso que la humanidad realiza de los bienes y servicios naturales y la capacidad de respuesta que tienen los ecosistemas para reponerlos.
Sin dudas es alarmador y deben tomarse cartas en el asunto, ya que “si todo el mundo viviera como lo hacemos en Argentina, se necesitarían alrededor de dos planetas”. Palabras de Manuel Jaramillo, director general de Fundación Vida Silvestre Argentina.