El Gobierno Nacional recibiría una gran bocanada de aire luego de que ayer, el tesoro logrará una importante adhesión al canje, aun por encima de lo que los inversores esperaban.
En total, el refinanció de deuda por $4,3 billones, se transformaría ahora en nuevos títulos en pesos con plazos a vencer en el 2024 y 2025. Lo cual permitiría “olvidarse” los millonarios vencimientos del segundo trimestre, ya que con esto, se consiguió despejar el 61,5% de los vencimientos totales en pesos.
Al reducirse significativamente el volumen de deuda que vence en el segundo trimestre, que hasta esta operación superaba los 6 billones de pesos, se minimizan notoriamente los riesgos de semejante concentración. La posibilidad de un “reperfilamiento” de la deuda quedaría descartado, al igual que también desciende la emisión de pesos por parte del Banco Central para salir a comprar títulos de aquellos tenedores que no quieran refinanciar próximamente.
Para la deuda que vence en el corto plazo y no fue canjeada, desde el ministerio de Economía se aclaró que continuarán las licitaciones como venía ocurriendo mes a mes.