- Posee 52 habitaciones de internación en un predio de 915 metros cuadrados.
- Centralizará la atención sanitaria y evitará traslados de internos.
- Los ministros Julián López y Gabriel Katopodis, de Nación, encabezaron el acto.
El ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Provincia, Julián López, conjuntamente con su par de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis, dejaron habilitado el nuevo Hospital Modular de Emergencia en el Complejo Carcelario N°1 “Rvdo. Francisco Luchesse” de Bouwer.
Ante la emergencia mundial causada por la pandemia del Covid-19, fue necesaria la construcción de Centros de Asistencia Sanitaria como anexos a predios penitenciarios existentes, con el objetivo de aislar posibles infectados y evitar una propagación dentro de las unidades penitenciarias.
“Esta Unidad Sanitaria que hoy tenemos el honor de habilitar, es el resultado de un trabajo conjunto de la Nación con la provincia de Córdoba, que viene a reforzar el gran esfuerzo y dedicación desplegados durante todo este tiempo, poniendo en valor primordial la salud de las personas privadas de libertad de nuestra provincia, y siempre en el cumplimiento irrestricto de los derechos humanos de las mismas”, manifestó el ministro López durante la inauguración.
A su vez, el ministro Katopodis resaltó “el trabajo conjunto y coordinado con el gobierno de la provincia de Córdoba, que permite fortalecer el sistema de salud y el cuidado de las personas privadas de su libertad”.
La flamante obra, que cuenta con 52 habitaciones de internación en un predio de 915 metros cuadrados y que fue concretada mediante un trabajo conjunto entre Nación y Provincia, no sólo dotará de un completo centro de atención de salud al Servicio Penitenciario de Córdoba sino también centralizará la atención sanitaria, eficientizará la asistencia a los internos e internas y evitará traslados a otros hospitales, pues brindará mayor cantidad de prestaciones.
El nuevo hospital fue diseñado con el asesoramiento del Servicio Penitenciario Federal y la UNOPS (Unidad de las Naciones Unidas de Servicio para Proyectos), responde a patrones internacionales de construcción de módulos en sistemas carcelarios y hace especial hincapié en las normas de seguridad que permiten resguardar a todo el personal que allí trabaja y a las personas privadas de su libertad.
Además posibilitará expandir el servicio a un total de 12 especializaciones médicas que se prestan dentro del Complejo Carcelario, donde además se proyecta contar con un “mini” quirófano para realizar intervenciones de menor complejidad y que requieran anestesia local. También contará con servicio de diálisis, ecografía y prestaciones que el personal de salud no cuenta al momento. También estará dotado de equipos de rayos X, electrocardiógrafos y cardiodesfribiladores.
La nueva obra fue erigida en base a los estándares internacionales para establecimientos carcelarios y se aplicó especial énfasis en el sistema de seguridad, tanto en las habitaciones como en la edificación en general. El sistema de construcción no deja nada a mano del interno para que pueda poner en riesgo su persona ni a los demás otros.
Además todos los materiales tienen tratamiento ignífugo (resistente al calor y al fuego), desde las almohadas, frazadas hasta las paredes de poliepropileno. Mientras que el abastecimiento proporcionado también incluye el equipo electrógeno y el sistema de seguridad a través de cámaras de monitoreo.
Asistieron además al acto, entre otras autoridades, el secretario de Obras Públicas de la Nación, Martín Gill; la diputada nacional Gabriela Estévez; la secretaria de Gestión y Organización Penitenciaria, Cecilia Lanzarotti; el secretario de Derechos Humanos, Calixto Angulo; el secretario de Arquitectura, Manuel Grahovac y el secretario de Salud, Pablo Carvajal y el jefe del Servicio Penitenciario, Juan María Bouvier.