El próximo gobernador de la provincia de Córdoba, Martín Llaryora, ha respondido a las graves acusaciones realizadas por su contrincante en las elecciones, Luis Juez, del partido Juntos por el Cambio. Juez había acusado al oficialismo de repartir “droga” a cambio de votos, además de otros elementos como colchones, frazadas, subsidios y dinero en efectivo.
En una entrevista, Llaryora hizo referencia a las acusaciones y destacó que él no tenía relación con los barrabravas de clubes, indicando que su rival político, como seguidor del equipo Talleres, tenía más probabilidades de conocer a este tipo de personas.
El gobernador electo expresó su descontento con las acusaciones, argumentando que estaba faltando el respeto a los cordobeses y perjudicando la imagen de la provincia. También recordó las polémicas declaraciones de Juez en el pasado, donde insultó a los ecuatorianos, y criticó su gestión como intendente de la ciudad, responsabilizándolo de llenar el municipio con empleados públicos.
En relación a las graves acusaciones de reparto de droga, Llaryora lo desafió a presentar pruebas ante la justicia y denunciar los supuestos hechos. Afirmó no tener conocimiento de narcotraficantes y recordó que Juez, como abogado penalista, había defendido a personas vinculadas con el narcotráfico en el pasado.
Concluyó señalando que, a diferencia de Juez, siempre ha reconocido sus derrotas en elecciones anteriores, y criticó que su contrincante siempre buscara excusas relacionadas con los votos cuando perdía.
Con estas declaraciones, el actual intendente de la ciudad, Córdoba, ha respondido contundentemente a las acusaciones de Luis, instándolo a tomar acciones legales si realmente cuenta con pruebas que respalden sus afirmaciones.