En una jornada cargada de tensión y debate, la Cámara de Diputados dio luz verde, con 125 votos a favor y 112 en contra, a una serie de modificaciones en la Ley de Alquileres. Estos cambios, propuestos por el bloque Juntos por el Cambio, ahora avanzarán hacia el Senado para su consideración. La votación se desarrolló en un ambiente de expectación, con tres abstenciones que dejaron en claro la polarización de opiniones en torno al tema.
Uno de los aspectos centrales del proyecto aprobado es el regreso a los contratos de alquiler de dos años de duración, marcando un cambio significativo respecto a la legislación vigente. Estos contratos contarán con actualizaciones en intervalos de cuatro meses, basadas en índices previamente acordados entre inquilinos y propietarios. Este cambio en el tiempo de duración ha sido considerado como una medida transitoria por parte de Juntos por el Cambio, mientras buscan los números necesarios para derogarla por completo en el futuro.
La sesión en el recinto estuvo marcada por un rechazo unificado de la oposición hacia el proyecto propuesto por el oficialismo, perteneciente al Frente de Todos. Este último mantenía los elementos más cuestionados de la ley actual, que incluyen contratos de tres años y actualizaciones anuales. Durante la jornada, inicialmente se abordaron 12 proyectos que buscaban la eliminación completa de la normativa existente. Sin embargo, al carecer de dictamen de comisión, estos requerían una mayoría especial que no se logró obtener, resultando en un fracaso de la maniobra.
Finalmente, tras intensos intercambios en el recinto, prevaleció la propuesta de la oposición, llevando el proyecto a la próxima instancia en el Senado. Allí, el partido gobernante, el kirchnerismo, se perfila como un posible bloqueo para su avance.
Entre los puntos clave del proyecto aprobado se encuentran:
Duración de Contratos: Los nuevos contratos tendrán una duración mínima de 2 años, revirtiendo la ley actual que establece plazos de tres años.
Ajustes de Precios: Los incrementos en los alquileres ya no estarán sujetos a un índice inflacionario. En su lugar, se establecerán ajustes mediante “acuerdos entre las partes”, con actualizaciones periódicas de entre 4 y 12 meses.
Depósitos e Ingresos: Se prohíbe la exigencia de pagos anticipados por parte del inquilino, así como depósitos de garantía superiores a un mes.
Responsabilidad de Reparaciones: El propietario tendrá la responsabilidad de atender reparaciones urgentes en un plazo de 24 horas desde la notificación del inquilino. En caso de reparaciones no urgentes, el plazo máximo será de 10 días corridos.
Cancelación de Contrato: Los inquilinos podrán resolver el contrato antes de su vencimiento, pero no antes de los primeros seis meses. Si notifican con al menos tres meses de anticipación, no se requerirá el pago de ninguna suma adicional.
Incentivos para Propietarios: Con el objetivo de reactivar el mercado de alquileres, el proyecto propone exenciones en el monotributo para aquellos propietarios que no superen ciertos límites en actividades simultáneas o unidades de explotación.