En junio de 2021, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtieron que el suicidio se había convertido en una de las principales causas de muerte en todo el mundo. Esta trágica realidad, silenciosa y a menudo incomprendida, avanza sin freno dejando estragos a su paso. Según datos del Ministerio de Salud argentino, en el país se registra un suicidio cada tres horas.
Recientemente, los estudiantes de la Escuela Industrial protagonizaron protestas en San Juan tras otro caso de suicidio adolescente. La demanda de psicólogos ha aumentado considerablemente, pero encontrar turnos disponibles se ha vuelto cada vez más difícil.
En mayo de este año, el Ministerio de Salud argentino publicó un informe epidemiológico sobre los suicidios ocurridos en el país entre 2010 y 2019, revelando un total de 31.847 casos en ese periodo.
Un informe del Sistema de Alerta Temprana – Suicidios, publicado en marzo de 2022 por el Ministerio de Seguridad de la Nación, detalla las estadísticas de suicidios en las 23 provincias argentinas y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires entre los años 2017 y 2020, centrándose especialmente en este último año.
Según el informe, en 2020 se registraron 3.171 suicidios en el país, lo que equivale a una tasa de 7,6 suicidios por cada 100.000 habitantes mayores de 5 años. A pesar de una disminución en comparación con 2019, el suicidio siguió siendo la principal causa de muerte violenta, representando el 35,0% de las muertes de este tipo.
El informe también destaca que, a lo largo de los años 2017 a 2019, las muertes en accidentes de tránsito fueron la principal causa de muerte violenta en el país. Sin embargo, en 2020, la tasa de muertes viales disminuyó en un 29,6%, mientras que la tasa de suicidios solo disminuyó en un 12,1%, lo que llevó al suicidio a convertirse en la principal causa de muerte violenta en Argentina ese año.
El análisis provincial revela que la provincia de Buenos Aires encabeza el ranking con un total de 850 suicidios en 2020, lo que representa una tasa del 5,3%. Entre Ríos registra la tasa más alta de suicidios, con un 15,5% (198 casos), seguida de Salta con un 15,1% (195 casos), Santiago del Estero con un 13,4% (119 casos), San Luis con un 13,3% (62 casos), La Pampa con un 13% (43 casos) y Catamarca con un 12,6% (48 casos).
En el caso de Catamarca, un artículo periodístico publicado en Página12 en agosto de 2022 alertó sobre las alarmantes cifras de suicidios en esa provincia. El psicólogo Diego Molina, director de SaluGénica, destacó la importancia de abordar este tema desde diferentes sectores, no solo el de la salud, sino también la justicia, la seguridad, la educación y las organizaciones sociales.
El suicidio, definido por la OMS como “el acto deliberado de quitarse la vida”, puede ser clasificado como activo o pasivo según el método utilizado para provocar la muerte. La prevención de este trágico desenlace es crucial y el Ministerio de Salud de la Nación brinda recomendaciones para abordar el problema, cómo reconocer los signos de alerta, mostrar interés y apoyo, respetar las diferentes expresiones de sentimientos y eliminar prejuicios.
Es fundamental motivar a las personas a hablar sobre sus sentimientos, fomentar amistades saludables, tomar decisiones de manera autónoma, enseñar habilidades para manejar el estrés y la adversidad, promover la autoestima y desarrollar habilidades sociales. La prevención del suicidio requiere una labor conjunta entre los sectores de la salud, la justicia, la seguridad, la educación y las organizaciones sociales, generando estrategias colectivas y efectivas.
En caso de necesitar ayuda, se puede llamar al 135 (línea gratuita desde Capital y Gran Buenos Aires) o al (011) 5275-1135 o 0800 345 1435 (desde todo el país). Estas líneas brindan apoyo personal, confidencial y anónimo.
