Dos meses después de su crimen, la familia de Brenda Torres, la joven de 21 años asesinada en Córdoba, recibió finalmente sus restos para darles sepultura.
La entrega se concretó en medio de un profundo dolor, ya que aún no fueron halladas todas las partes de su cuerpo. Sus allegados reclamaron a la Justicia que continúe con los operativos de búsqueda y que el caso no pierda impulso.
El padre de Brenda expresó que la despedida será atravesada por una herida irreparable y pidió condenas ejemplares para los responsables.
La investigación permanece bajo secreto de sumario, con dos hombres detenidos: Cristian Aranda (38) y Gustavo Lencina (53), imputados por el delito de femicidio.