La Unión Tranviarios Automotor (UTA) anunció este domingo un paro de colectivos de corta y media distancia en todo el país, programado para el próximo martes. Esta medida de fuerza se produce luego de que las negociaciones salariales entre el gremio y las cámaras empresarias del sector no alcanzaran un acuerdo satisfactorio.
En la reunión paritaria celebrada el pasado jueves en la sede central del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, la UTA, liderada por Roberto Fernández, reiteró su solicitud de recomposición salarial. Ante la falta de avances positivos en este aspecto, el sindicato ratificó su decisión de llevar adelante el paro que afectará a las unidades de transporte en todo el territorio nacional.
El conflicto se vio agravado por la ausencia de funcionarios gubernamentales en la última reunión, lo que generó malestar tanto en la UTA como en la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor. En un comunicado, esta última entidad expresó su descontento por la falta de avances debido a la ausencia de autoridades del Ministerio de Trabajo.
Con el vencimiento de la conciliación obligatoria programada para este lunes, se ha programado una nueva audiencia virtual para tratar de alcanzar un acuerdo satisfactorio para ambas partes. La ley 14.786 contempla la posibilidad de prorrogar la conciliación obligatoria por cinco días adicionales si existen indicios de un posible acuerdo. Sin embargo, se establece que los plazos máximos para extender la conciliación no pueden superar las dos convocatorias.
La UTA tiene la intención de resolver el conflicto durante la audiencia de este lunes, dejando en claro que la responsabilidad de la crisis recae en aquellos que tienen la capacidad de solucionarla. Según el gremio, la falta de un acuerdo salarial recae en el sector empresario, las autoridades del Ministerio de Transporte de la Nación, así como en los responsables del transporte en las provincias y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Por su parte, el sector empresario del transporte solicita al Gobierno más subsidios para hacer frente al pago de salarios y gastos operativos. Sin embargo, el Ministerio de Transporte está analizando una revisión del sistema de subsidios debido a las disparidades existentes en la red de transporte a lo largo y ancho del país.
En resumen, el escenario actual plantea tres posibles soluciones: un acuerdo entre las partes durante la audiencia del Ministerio de Trabajo, una posible extensión de la conciliación obligatoria por última vez o la confirmación del paro de 24 horas en todo el país a partir de la medianoche del martes 13.
Gustavo Mira, vicepresidente de la Federación de Empresarios del Transporte Automotor de Pasajeros (Fetap), considera que la situación es difícil, ya que las empresas de transporte no pueden afrontar un aumento salarial justo si los ingresos no se ajustan en la misma medida. Mira destaca que en Córdoba, los salarios de los trabajadores representan aproximadamente el 62% de los ingresos de las empresas, y su objetivo es evitar firmar un aumento que luego resulte en un incumplimiento.
César Pereyra, vocero de la UTA en Córdoba, afirma que la audiencia del lunes será crucial, pero anticipa que será difícil llegar a un acuerdo. Asegura que la seccional acatará la decisión que tome el Consejo Directivo Nacional del gremio.
Las demandas salariales de la UTA incluyen un incremento retroactivo al mes de abril, estableciendo un salario básico de $262,000, además de una suma fija de $32,000. Para los meses siguientes, aspiran a alcanzar un básico conformado de $284,000 en mayo y $320,000 en junio. Para la segunda mitad del año, la UTA busca llegar a un salario de $348,800 en julio, $380,192 en agosto y $414,409 en septiembre.