El Gobierno liderado se enfrenta a un desafío cada vez mayor en su objetivo de reducir la inflación a un 60% para finales del año 2023. Los últimos datos del Índice de Precios al Consumidor (IPC) publicados por el INDEC revelan un aumento del 8,4% en abril, lo que eleva la inflación acumulada de los primeros cuatro meses del año al 32%. Esto pone en riesgo la meta del Gobierno de reducir la inflación en 35 puntos porcentuales en los próximos dos años.
Desde el comienzo del año, la inflación ha ido en aumento, y las expectativas de reducción no se han cumplido. A pesar de las proyecciones optimistas, la inflación ha superado las expectativas del equipo económico de Massa. La meta del Presupuesto del Gobierno para reducir la inflación parece cada vez más ambiciosa y difícil de alcanzar, y las consultoras privadas han actualizado sus estimaciones con una inflación proyectada del 126,4% para 2023.
El equipo económico liderado por Massa tendrá que tomar medidas concretas y efectivas para cumplir con las metas establecidas, y evitar un impacto negativo en la economía y en la confianza de los inversores. La situación económica del país sigue siendo incierta, y el desafío de reducir la inflación parece cada vez más difícil de superar.
“La meta estaba mal planteada de entrada. Si bien el Gobierno tiende a subestimar la inflación para intentar ‘alinear’ las expectativas en torno a un target, sin un plan de fondo es simplemente una expresión de deseo”, sostuvo Matías de Luca, economista de la consultora LCG.