La Cámara de Apelaciones de Nueva York otorgó a la Argentina una medida a favor en el caso YPF y suspendió de manera preventiva la entrega del 51% de las acciones de la petrolera nacional. La decisión, tomada por el Segundo Circuito, frena el fallo de la jueza Loretta Preska, que había ordenado transferir las acciones como parte del pago por la sentencia de US$16.100 millones dictada en 2023.
La suspensión es de carácter temporal y se extenderá hasta que un panel de tres jueces analice el pedido de apelación. Según el fallo, los fondos demandantes encabezados por Burford Capital deberán presentar su oposición antes del 17 de julio, mientras que la Argentina podrá responder hasta el 22 del mismo mes. El objetivo es definir si la medida se mantiene hasta que termine el proceso de apelación o si se retoma la ejecución del fallo.
Desde el Estado nacional destacaron la importancia del fallo para “la defensa de la soberanía argentina” y aclararon que, tras esta decisión, ya no corre el plazo inicial de 72 horas que Preska había impuesto para entregar las acciones.
El caso tiene origen en la expropiación de YPF en 2012. Los demandantes, que adquirieron derechos litigiosos del grupo Petersen, reclaman que la Argentina no respetó el estatuto de la empresa al nacionalizar las acciones de Repsol sin ofrecer las mismas condiciones al resto de los accionistas. Desde 2023, la sentencia en contra del Estado argentino creció con intereses hasta superar los US$17.700 millones.