En medio de una campaña electoral cada vez más intensa, el candidato presidencial por La Libertad Avanza, Javier Milei, arremetió contra Guillermo Yanco, esposo de Bullrich, acusándolo de llevar a cabo supuestas “operaciones de prensa” para dañar su imagen. El conflicto se desató cuando hace cerca de 2 meses, durante la visita de Milei a la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en conmemoración del aniversario número 29 del atentado.
Durante el evento que tuvo lugar el pasado 18 de julio en la AMIA, Milei expresó su descontento con la actitud de Yanco: “El marido de Patricia Bullrich fue quien fogoneó la mentira de cuando yo fui a la AMIA. Recibí mucho afecto por parte de las personas que estaban en el acto. Sin embargo, dijeron que a mí me insultaron, me abuchearon, me escupieron y que, como me quisieron linchar, me tuve que ir”. Estas declaraciones encendieron la controversia y pusieron el foco en la relación entre ambos contendientes políticos.
En respuesta a las acusaciones de Milei, la candidata presidencial de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, no tardó en tomar la palabra y enfrentar la situación. Durante una entrevista en vivo en el programa de La Nación, fue directa y contundente: “Que no se meta con mi marido, que se meta conmigo. Yo soy la candidata a presidente”. Además, enfatizó que no le agrada que se involucren con su familia: “Cuando se meten con mi hermana, no me gusta”.
Bullrich, líder del PRO, defendió a su esposo destacando que Guillermo Yanco no tiene participación política activa y tampoco está vinculado con la AMIA. En sus propias palabras, “no pertenece a la AMIA ni hace ningún tipo de operaciones, y quienes lo conocen, saben que es un tipo amable y agradable”. La política subrayó el dolor que le genera que ataquen a alguien que no está involucrado en la arena política, y concluyó su postura desafiando directamente a Milei: “Me duele, no tienen que meterse con alguien que no está involucrado en la política. Discuta conmigo, acá, Milei”.
La tensión entre Milei y Bullrich, que se ha venido gestando en el marco de una campaña electoral, sigue generando debates y opiniones encontradas. Mientras tanto, los ciudadanos y el espectro político en general observan atentos cómo se desarrolla esta controversia, que añade un nuevo elemento de fricción a un proceso electoral ya de por sí intenso.