El partido de Argentina- Países Bajos dio mucho de qué hablar.
Y es que el árbitro español Antonio Mateu Lahoz estableció una marca única en la historia de los mundiales.
14 jugadores amonestados, 48 infracciones pitadas (30 para Argentina y 18 para Países Bajos). Además de sancionar una falta en contra, segundos después de los 10 minutos que había adicionado al tiempo reglamentario.
Sin embargo, el árbitro no fue penado por la FIFA luego de que la misma evaluara su desempeño. Así mismo informaron que el referí finalizó su actuación en la copa del mundo con ese encuentro.