El Indec dio a conocer esta semana los datos de la inflación de febrero con una cifra que arrojó un porcentaje de 6,6%. Sin embargo, los datos aún más alarmantes son los referidos a la canasta básica.
La Canasta Básica Alimentaria aumentó un 11,7% en febrero, por lo que una familia tipo de cuatro personas necesitó durante ese mes percibir ingresos mayores a $84.010 para no ser indigente. A su vez, la Canasta Básica Total, que además de alimentos incluye el costo de otros rubros como lo son la ropa, el transporte y los servicios como luz, gas y demás, subió un 8,3% haciendo que una familia necesite cobrar al menos $177.063 para no encontrarse por debajo de la línea de la pobreza.
En terminología interanual, el grupo de alimentos al que una familia debe acceder para no ser considerada indigente subió en un 115,1%. Es decir, que desde febrero del 2022, los precios de los alimentos básicos se multiplicaron por más de 2.
Es así que la suba de la canasta en los dos primeros meses del año ya acumula un alza del 13,11%. Y en los últimos 12 meses (febrero 2022 contra febrero 2023), el incremento llega al 104,2%.